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Laguna Negra - Urbión - Risco Zurraquín (03-07-2010)
ALOCGAR:
LAGUNA NEGRA - URBIÓN - RISCO ZURRAQUÍN
DISTANCIA: 10,2 km
DESNIVEL: 862m
PARTICIPANTES: Gruñon - Geneneral Motors - Lobisome - Samaruc
Hemos elegido este fin de semana para hacerle una visita a la Sierra de Urbión. Algunos ya conocemos parte de la sierra y sabemos de las bondades paisajísticas de estos lugares, pero esta sierra siempre supera todas las expectativas y hoy se nos muestra más pletórica que nunca.
Partimos desde las proximidades de la Laguna Negra. El hielo ha forjado aquí una laguna oscura y misteriosa rodeada de elegantes y verticales cresterías. El lugar está escoltado por la masa forestal más importante de la península.
Desde la laguna superamos un fuerte desnivel que nos deja en un excelente mirador sobre ella y sobre todo el circo granítico que la rodea. Desde aquí, tomamos dirección al bellísimo paraje de la laguna helada siguiendo más o menos el gr 86. Caminando entre humedales, prados y pastizales, llegamos al alto de Llanos de la Sierra, desde donde ya apreciamos claramente el camino de subida a la muela de Urbión y de la última trepada hasta la cima. Un fuerte viento y la posibilidad de una amenazadora tormenta hacen que estemos escasos instantes en la cima; lo justo para inmortalizar el momento y contemplar la vaguada donde nace el rio Duero. Descendemos rápidamente hasta la Laguna Larga sorteando los últimos neveros que quedan. Queremos volver a la Laguna Negra pasando por el Risco Zurraquin para hacer una variante más entretenida de la ruta. En dicho alto, quedamos estupefactos y atónitos ante el espectáculo que nos ofrece su campera. Cientos de lajas de piedra a modo de monolitos han sido puestas aquí por todos los montañeros que han ido pasando por el lugar. Su mera visión, nos sorprende y nos deja helados. Pocos sitios, por no decir ninguno, nos han transmitido sensaciones tan placenteras y mágicas como este lugar. De hecho, nos inspiro una leyenda mezclando esa sacudida emocional con algunas ocurrencias y sucedidos graciosos que nos acaecieron el fin de semana.
Después de saborear esta vez sí, esta cima con calma, nos descolgamos por un caótico glaciar de piedras que penetra en el bosque buscando el retorno hacia la Laguna Negra.
ZURRAQUIN – LA LEYENDA DE LAS LEYENDAS
Durante siglos….. durante milenios; el terrible palomo negro había sometido y esclavizado a todos los reinos de la tierra conocida. Su poder radicaba en el poder que le otorgaba el báculo mágico que había arrebatado a la fuerza a los antecesores del gran mago Alócgaron. Hartos de su cruel dominación, los cuatro caballeros puros habían formado un gran ejército para acabar con la tiranía de la terrible y pestilente bestia.
Conocíamos la leyenda y conocíamos su guarida. Su refugio estaba en el hostil risco Zurraquin; un sitio fantasmagórico sin ningún atisbo de vida, un lugar desolado, un paramo, un erial donde la sola existencia es una quimera. Sabíamos que solo la magia acabaría con el perverso palomo negro, para ello los cuatro caballeros deberíamos alcanzar su escondrijo, arrebatarle el báculo mágico, asirlo con fuerza y esperar a que un rayo alcanzara el bastón al mismo tiempo que proferimos el conjuro. Muchos caballeros habían intentado esta misión, pero todos ellos habían perecido en el intento.
La noche elegida para la ofensiva nos recibe tormentosa y fría; son las condiciones ideales para el asalto a la peña. Todo un ejército de cincuenta mil caballos, diez mil elefantes y más de un millón de hombres, nos encontrábamos ya prestos para la lucha en las inmediaciones del Risco Zurraquin. La incursión ha de ser rápida, no hay que darle ninguna ventaja al monstruo. La estrategia es clara; un ataque en tromba debe sorprenderlo y entretenerlo mientras los cuatro caballeros intentan llegar al báculo.
La división de Grunyon iba en vanguardia; desde arriba dirigiría al resto de las escuadras. Trataría de mantener compactas las líneas de los elefantes para utilizarlas como defensa. La división de Xavion, con el resto de elefantes y toda la caballería trataría de contener las primeras embestidas del terrible monstruo.
El relincho y el inevitable y atronador galope de los caballos despiertan a nuestro enemigo. Desde su atalaya, consternado y rabioso contempla nuestro decisivo avance ladera arriba. Luego lanza un terrible alarido y batiendo sus poderosas alas se lanza contra nuestras primeras escuadras que ya han llegado a la campera. Solo con el hedor de su aliento, miles de nuestros hombres y de caballos perecen de asfixia. Nuestras armas no son capaces ni tan siquiera de incomodar lo más mínimo al monstruo y caen mutilados entre su pico y sus garras. El batir de sus alas gigantescas provoca un huracán con el que lanza piedras de enormes dimensiones sobre el grueso de nuestro ejército. En escasos minutos de batalla, decenas de miles de nuestros hombres yacen desmembrados sobre las laderas del pico. Estamos siendo masacrados fácilmente; somos un mero juguete a merced de la bestia. Ríos de sangre circulan ladera abajo anegando el fondo de los valles. Jamás nuestros ojos contemplaron tanto horror y tan de cerca.
Por lo menos la estrategia estaba dando resultado. Los cuatro caballeros, ocultándose entre los restos de los compañeros muertos prosiguen su camino hacia su objetivo. Tres de ellos; Xavion, Grunyon y Lobishome están ya a escasos metros de donde se encuentra oculto el báculo. El General; que ha sido herido en la batalla, ha quedado rezagado.
El palomo negro ha acabado ya con todas nuestra divisiones. A excepción de los caballeros, ningún ser vivo quedaba con vida sobre el campo de batalla. Buen conocedor de la leyenda, ahora sobrevuela la montaña buscando entre los restos de los hombres y de los animales a los cuatros caballeros puros. Al no encontrarlos, lleno de ira se dedica a despedazar los cuerpos de los soldados muertos.
En un gesto intuitivo y rápido, vuelve la cabeza hacia su guarida y sorprende al General aproximándose a la entrada de la cueva. Quizás ya sea demasiado tarde, pues el general sacando fuerzas de flaqueza consigue llegar a la altura de los otros tres caballeros que ya aferran el báculo con fuerza. Ni tan siquiera la oscuridad de la noche nos evita contemplar sus ojos monstruosos inyectados en sangre y fuego. Tras otro bramido descomunal que nos hiela la sangre y los sentidos, este leviatán satánico se prepara para darnos el golpe definitivo y mortal.
Mientras tanto, los caballeros están acabando el ritual mágico asiendo el báculo con fuerza. Apremiados, pero seguros, los cuatro pronuncian las últimas palabras del conjuro.
-¡¡ Por la magia del gran mago!!
-¡¡ Por la fuerza de los caballeros puros!!
-¡¡ Por la paz en la tierra conocida!!
-¡¡Devuelve a las profundidades de la tierra lo que nunca debió salir de ella!!
Cuando todo parecía perdido para los cuatro; un rayo henchido de luz se descolgó desde la capa de las tinieblas inundando con su resplandor el terrible escenario, atravesando de arriba abajo el báculo y a los guerreros.
Sin mediar tiempo, un gran seísmo comienza a sacudir la tierra y todo el suelo a nuestro alrededor se desploma, mostrándonos un fondo infinito de fuego y magma. El monstruo, sorprendido por la fuerza de la magia, se precipita irremediablemente hacia el inacabable y terrible abismo. Casi al instante, la grieta abierta se cierra, recluyendo para siempre al palomo en las profundidades de la tierra.
De repente, la luz relegó a las tinieblas y la calma se adueñó de esta tierra atormentada y bélica. Ante nuestros ojos atónitos, todo el entorno comienza a sufrir transformaciones. Todo el flujo sanguíneo que ha pigmentado el campo de batalla, comienza a convertirse en un manto verde del que emergen enormes bosques repletos de helechos y de flores; los grandes depósitos de sangre que se han formado en los fondos del valle, se van convirtiendo en bellísimas lagunas de aguas transparentes y heladas. De inmediato, las almas de nuestros soldados…transformadas en millones de palomas blancas se elevan sobre los cielos formando hermosas nubes claras. Por último cada uno de sus cuerpos se transforman en túmulos erectos de piedra; dejando en las camperas del Zurraquin un monumental y soberbio conjunto pétreo que deja huella testimonial de la batalla más grande jamás contada.
Nada parecía indicar ya en este momento los hechos vividos aquí hace apenas unas horas; nada. Ni un solo vestigio del cruento enfrentamiento de nuestro ejército contra la sanguinaria bestia. Dice la leyenda que aún hoy, si se pone atención y se aproxima el oído a los grandes bloques de granito que taponan la gran grieta, se escuchan los gemidos del palomo negro confinado en la obscuridad del averno.
Laguna negra - Urbion - Risco Zurraquin.mpg
LOBISOME:
¡¡¡ Que bonita encontramos la sierra en esta ocasión !!!
Otra de las rutas a repetir
¡¡¡¡ AVISO IMPORTANTE !!!!! Pienso hacer preguntas con respecto a los dos textos......... a si que .....................vosotros vereis. (cabreado2) (periodico) (leer)
Sertorio:
Tengo la suerte de conocer tan maravillosos parajes y esta bonita ruta, la verdad es que puede considerarse de las zonas mas bonitas de España. Impresionante reportaje y preciosas fotos. En cuanto a la leyenda: esta genial!!!!! Podria formar parte de los relatos del Silmarillion pues el hado oscuro me recuerda a los espiritus malignos creados entre la sombra y la llama....pregunta lo que quieras Lobisome, me ha gustado tanto que apuesto a que saco un 10, jejejeje...
capitan trueno:
Impresionante, espectacular. Una ruta de la más bonita del mundo. Lobisome ¿ para cuando el examen? (risa2) (risa2) (risa2)
ALOCGAR:
--- Cita de: capitan trueno en 05 de Enero de 2011, 09:25 --- Lobisome ¿ para cuando el examen? (risa2) (risa2) (risa2)
--- Fin de la cita ---
No tengas prisa y repasatelo bien
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